¿Alguna vez habías oído hablar de la estructura organizativa horizontal? Cada vez son más las empresas que adoptan esta metodología y es que aporta grandes ventajas a la empresa a medio y largo plazo tanto a nivel personal como laboral.
Antiguamente conocíamos las empresas donde lideraba una única persona. La imagen del director era intocable y podía hacer lo que quería ya que en sus manos estaba la reputación de la empresa. Cada vez, son menos las empresas que siguen esta metodología y que no aceptan cambios o modificaciones que no sean del CEO de la empresa.
La comunicación interna es la clave de toda empresa. Un aspecto que no es visible cara al público pero que afecta de manera directa. Los trabajadores son el mejor activo de cualquier empresa por ello cuidar de ellos es lo mismo que cuidar de la marca y de su filosofía.
A diferencia de la estructura organizativa vertical, el rasgo característico de la estructura organizativa horizontal es que transfiere cierta responsabilidad y toma de decisiones en la escala de gestión. Con esto queremos decir que se capacita a los trabajadores de la empresa para sentirse responsables del éxito de la compañía. Se escucha en todo momento a los trabajadores de la empresa y poder centrarse en una mejor comunicación interna de la organización.
Una estructura organizativa horizontal tiene como característica una corta cadena de mando y un amplio abanico de control de gestión. Debido al pequeño número de capas de gestión de la empresa, los trabajadores informan a un administrador único. Quienes realmente pueden aprovechar la estructura organizativa horizontal son las pequeñas y medianas empresas ya que encontramos una mayor facilidad a la hora de intercambiar ideas y opiniones.
La gerencia de las pequeñas empresas gracias a la estructura organizativa horizontal tiende a ser más democrática y permite ofrecer un mayor nivel de innovación en cuanto a ideas y sugerencias. Encontramos una comunicación mucho más rápida, fiable y más eficaz que en las grandes estructuras.
Tras explicar la estructura y la ventaja de la comunicación podemos deducir que esto favorece en la productividad de los trabajadores ofreciendo mejores resultados en la empresa. Antiguamente el trabajo de las empresas se basaba en el método Ford donde encontrábamos el trabajo en cadena sin necesidad de comunicación e interacción. Las cosas han cambiado y cada vez más los trabajadores de una empresa representan un gran porcentaje de los éxitos conseguidos por esta.